Al acumular más de lo que necesitamos y al tener viviendas cada vez más pequeñas, tenemos todos los ingredientes para que nos resulte tan difícil mantener el orden. Las cosas deben estar en su lugar apropiado y en su justa medida. Lagom es una palabra de origen sueco (nórdico) que significa 'tanto o tan bueno como debería ser'. Al poner orden en nuestras pertenencias, ponemos orden también en nuestro corazón. Guardamos en el presente objetos del pasado para su posible uso en el futuro.

Proyectos

Recibidor

La necesidad de unas pequeñas baldas.

Entramos en casa con las llaves, el bolso, cazadora… y en este caso no teníamos donde dejar las cosas. Por un lado, colocamos unos percheros en la pared, para evitar dejar todo en el suelo.

Por otro, colocamos unas baldas a medida en el zapatero. De esta manera, cada par de zapatos tiene su sitio y los encontramos más fácil.